En esta nueva entrada me centraré en las últimas tendencias a la hora de decorar las paredes de vuestras casas.
El papel pintado fue muy utilizado en nuestros hogares, fundamentalmente en los años 60. Con el paso del tiempo se dejo de usar hasta que hoy en día se ha recuperado y mucha gente lo vuelve a tener en cuenta en la decoración de las paredes de su hogar.
El papel pintado es una solución cómoda y limpia para decorar la casa. La mayoría de los papeles son vinílicos, lo que significa que se pueden limpiar. Los hay lisos con texturas, flores, paisajes, cuadros, rayas, motivos infantiles y diseños para cocina y baños.
Dependiendo de la estancia de la casa que se vaya a decorar, os recomendaría distintas alternativas:
En el salón, dependiendo de sus dimensiones, propondremos diferentes opciones. Dar un toque a una pared, que puede ser la de la zona del salón, o decorar con papel la zona del comedor. Depende mucho el diseño del papel que escojamos, del estilo del mueble y tapizado de los sofás, así como del tipo de textil de ventana que se tenga
El hall y el pasillo de la casa es un lugar bastante apropiado para empapelar dado que son zonas de paso donde se puede dar un toque personal sin condicionarlo a nada, manteniéndolo más tiempo en buen estado.
Las cocinas y baños también son apropiados siempre que queden paredes libres de azulejos o se parta de una obra o reforma de casa, donde puede cada uno distribuir las paredes como quiera. Aquí es imprescindible que el papel sea resistente y vinílico.
En la cocina se buscan motivos de animales, frutas y paisajes. En los baños tendemos a la utilización de papeles lisos con texturas, rayas, cuadros o flores pequeñas, algo con motivos marineros o naturales también son adecuados.
En las habitaciones de matrimonio, recomiendo empapelar la pared del cabecero de la cama, eso le dará profundidad a la habitación. Aquí los motivos del papel dependerá en gran medida del resto de la decoración de la habitación. Si se tiene las colchas y cortinas con motivos florales, nos decantaríamos por papeles lisos con texturas o rayas discretas. En caso de tener todo lo textil con colores neutros, se podrá romper con el papel y darle un toque a la habitación.
Las habitaciones infantiles son apropiadas para el papel, hay infinidad de opciones originales para darle el último toque a la habitación. Existen murales enteros que ocupan paredes completas a juego con lo textil, hay dibujos que parecen pintados a mano y también pegatinas que en habitaciones ya hechas son una solución buena para dar un pequeño cambio a las habitaciones de los más pequeños de la casa. Las pegatinas las tenemos de diversos motivos: deportes, princesas, animales, naves espaciales, estrellas…
El papel pintado ofrece multitud de opciones perfectamente adaptables a todo tipo de casa y decoración.
En ocasiones, empapelar una habitación entera podría resultar excesivo, lo novedoso y original del papel puede volverse monótono y aburrido, si el mismo estampado se repite durante demasiados metros. Por lo tanto, una opción de última moda consiste en empapelar una única pared de la estancia y pintar el resto de un color uniforme, que combine bien con el papel elegido. De esa manera, centraremos la atención en esa pared, incluso podemos utilizarlo como una forma de separación entre zonas de distinta utilidad que compartan un mismo espacio.
Espero haberos dado alguna idea para que podáis crear ambientes distintos, sacando el máximo provecho a la hora de combinar el papel pintado con la decoración de vuestro hogar.
Saludos Paula Vallaure